El trading no es una actividad propicia para los artistas. Es mucho más adecuado para los tipos metódicos y disciplinados. El objetivo a perseguir no es el trading, sino la consistencia en el trading.
Hace bien poquito me recordaban un tuit de mi admirado Xavier García, más conocido en el mundillo del trading como Blai5, que sentaba muy gráficamente las bases de lo que debe ser invertir en Bolsa:
Tabla de Contenidos
Invertir en Bolsa requiere ser como un martillo pilón. Nada de virguerías de alfarero en esto del trading. Valen mucho más los objetivos modestos que se cumplen a diario que los grandes días seguidos de jornadas depresivas.
Paralelismos entre trading y mus
Al final, el trading tiene mucho que ver con a las partidas de mus que de pequeño vi jugar a mi padre durante horas. Ya de grande, pude comparar aquél estilo sobrio, sin apenas dar ocasión a descartes ni órdagos que llevarse a la boca, con ese otro juego alegre que adopté yo mismo de joven.
El juego de mi padre y sus amigos era de trantrán, de dejar lances en paso y contar piedras cuando se levantan las cartas. El mío era juego de bocazas, de intentar ganar piedras con las cartas sin voltear. Juego de todo o nada. Mi padre hubiera sido un gran trader. Yo tuve que aprender de dejar de ser un bocazas para ser un trader decente y empezar a ganar dinero en Bolsa.
En el mus no suele ganar el más osado salvo que siempre le acompañe la suerte en forma de «solomillo». Cambiando de juego, en el póquer suele terminar ganando quien mejor calcula sus probabilidades de éxito. En el trading la esperanza estadística positiva es la clave del asunto y lo mejor para aproximarse a ella es establecer objetivos poco ambiciosos que se puedan conseguir con constancia.
Como dice Blai5, este negocio no consiste en ganar 50 euros un día. Pero es que ni siquiera consiste en ganar 1.000 euros en un día. Consiste más en ganar 50 euros todos los días. A la larga, el trading es de los constantes, de los consistentes. Como también ocurre en el mus y en el póquer.
¿Trading o inversión?
La pregunta no es baladí y no soy el único que se la plantea. Rrecientemente se la ha formulado también el gran Uxío Fraga. Asegura que invertir en Bolsa es en realidad intentar ganar dinero con el dividendo generado por las inversiones y que el trading es especular con los activos para intentar ganar dinero con sus cambios de precio.
En líneas generales estoy de acuerdo con esta apreciación. Invertir en Bolsa es una actividad pasiva. Sembrar y esperar a recoger varias cosechas. El trading es mucho más activo y requiere un dominio de la jugada muy superior.
El objetivo es vivir del trading
Sin embargo, no estoy tan de acuerdo con Uxío en que se puedan hacer las dos cosas al mismo tiempo. No nos engañemos. Cuando uno se mete en esto es para especular.
Hubo un tiempo en el que tuve tarjetas de visita escritas por ambas caras. En una se decía que soy periodista y se proporcionaban mis datos profesionales. La segunda cara me identificaba como «especulador en Bolsa» y facilitaba la dirección de mi blog en internet.
Al principio, cuando tras el ERE en ABC aún dedicaba buena parte de mis horas a DiarioAbierto, entregaba las tarjetas por el lado del periodista. Cuando abandoné definitivamente la profesión, comencé a entregarlas por el lado del especulador. Y cuando logré no tener que salir de casa para ganarme el jornal, dejé de entregar tarjetas.
Hice aquellas tarjetas por el puro placer de provocar pero también por necesidad de autoafirmación. Mi objetivo era ser un especulador y si quería conseguirlo tenía que convencerme de ello. Logré serlo cuando dejé de entregar tarjetas. Logré la consistencia deseada en mi trading y las tarjetas quedaron el el olvido. Tanto que ni siquiera sé si conservo alguna…
El asunto de las tarjetas ilustra claramente cómo desde el comienzo de esta aventura el objetivo era trading puro y duro, aunque no supiera en ese momento si se llamaba así o de otra forma. Nunca pensé en comprar unas acciones del Santander o el BBVA que tenerlas durante años para cobrar los dividendos. Es más, en todos los años que llevo recibiendo preguntas sobre trading, ninguna ha sido acerca de dividendos.
A los pobres no nos valen los dividendos
Una cosa es que además de estar posicionado en un activo tengas la oportunidad de recibir un dividendo y otra muy distinta es que bases tu estrategia en el cobro de un dividendo. No recomiendo esta segunda opción, porque a los pobres no nos sirven los dividendos.
Me explico. ¿Cuántas acciones de una compañía vas a tener? ¿Podrás recibir con ellas 50.000 euros de dividendo para que te arreglen el año? Ya te digo que la respuesta a la segunda pregunta es que no. Lo máximo que vas a cobrar en dividendos es una cantidad que apenas te dará para unas cañas, todo lo más para invitar a una cena a alguien.
Amancio Ortega posee en torno a un 60% del capital de Inditex y eso le reporta un dividendo anual estimado de más de 1.600 millones de euros. Imaginemos por un momento que queremos emular a escala al fundador de Zara.
Un caso práctico con Inditex
Para hablar de cosas reales, establezcamos que queremos cobrar de Inditex 100.000 euros al año en concepto de dividendo. Es una cantidad apreciable y que de momento permite vivir muy bien a una familia. ¿Cuanto necesitamos invertir?
Hagamos las cuentas de la forma más sencilla, mediante simples reglas de tres. Si un 60% de Inditex produce 1.600 millones de euros, para obtener 100.000 euros necesitaré tener un 0,00375% del capital Inditex.
¿Cuánto necesitaré invertir en el grupo textil a precios actuales para conseguir esa participación? Si la capitalización de Inditex es ahora mismo de unos 85.000 millones de euros, un 0,00375% del capital nos costaría unos 3,185 millones de euros.
Que nadie dude que cuando tenga esos millones invertiré dinero para vivir del dividendo. Entre otras cosas, te permite no estar preocupado por el precio de las acciones y eso suele ser sinónimo de que también ganarás dinero de esa forma, aunque no la busques. Un buen día verás que has duplicado el valor de compra y serás más rico…
Pero mientras no tenga esos millones, tendré que aplicarme la gran frase de André Kostolany: «quien tiene mucho dinero puede especular; quien tiene poco dinero no debe especular, pero quien no tiene dinero tiene que especular». Y a efectos de comparación con la estrategia de ingresos de Amancio Ortega, no es que tenga poco dinero, es que soy más pobre que las ratas.
Hay que especular pero somos analfabetos financieros
Una vez comprobado que no nos queda otra opción que especular, tenemos que asumir que no estamos preparados para hacerlo. El sistema ha determinado que los españolitos de a pie carezcamos por completo de varias cosas que han quedado reservadas tradicionalmente para las élites y entre esas cosas destacan dos por encima de todas: el aprendizaje de idiomas y la comprensión del mundo del dinero.
Enseñando mal los idiomas se garantizaban que sólo quien podía pagarse estancias fuera de nuestro país hablara con soltura algo más que español. En el caso del dinero es más sangrante aún. El español ha hecho caso al poder sin rechistar y ha asumido que es muy difícil manejar y es tarea reservada para los bancos. Luego nos quejamos de lo que nos cobran y de lo que nos roban, pero el 99% de la culpa la tenemos nosotros, por acomodados.
Para hacer algo de justicia, debo traer a estas líneas a mi padre. Con 14 años me puso a su lado a hacer la declaración de Hacienda y me nombró su «ayudante» para ir al banco. Le vi negociar créditos, firmar letras, protestar comisiones, tomar cafés con directores de banco y desconfiar de sus consejos, usar todo tipo de tarjetas y cada una para una cosa concreta…
Aprendí mucho sin darme cuenta, pero, sobre todo, le perdí el miedo al manejo de mis dineros, que es lo que le pasa al 99% de los españoles. Eso sí, eso no me sirvió para mucho en el trading, Sólo para dar el primer paso y «atreverme» a entrar en este mundo. El resto ha habido que hacerlo paso a paso.
Market Timing y consistencia
Probé bastantes cosas, desde el trading intradiario a distintos sistemas con acciones, Forex o futuros sobre índices, pero no fue hasta que llegué al Market Timing cuando me sentí «seguro». Lo entrecomillo porque ese término es difícilmente encajable en trading y, en general, en el mundo de las inversiones.
El riesgo es inherente a esta actividad y el premio por asumirlo son buenas ganancias cuando haces lo correcto. Cuando no lo haces, el premio se convierte en precio y te dejas jirones en cada operación.
Lo primero que deberían decirle a cualquier tipo que se acerca a esto de la Bolsa es precisamente eso. Que siempre va a correr el riesgo de perder. Cuando uno compra lotería tiene asumido que va a perder su dinero y sólo lo hace por la ilusión de que podría ser el afortunado con el pelotazo de esta semana. En cambio, cuando uno llega al trading le venden una seguridad que no existe. Si me aceptas un consejo, si quieres sobrevivir en esto, olvida la seguridad y acepta el riesgo.
El trabajo (y no termina nunca) que tienes que hacer para conseguir un trading consistente es precisamente acotar el riesgo. Y, como en el póquer, la madre del cordero está en la esperanza estadística. El Market Timing es la herramienta que yo elegí para buscar que esa esperanza estadística fuera positiva en mis operaciones.
En esencia, no se trata de algo demasiado complicado. Se trata simplemente de asumir la gran verdad del trading de la que habló el gran Jesse Livermore: «sólo hay un lado del mercado, y no es el lado alcista ni el lado bajísta, sino el lado correcto».
Aquí podemos ver un gráfico con el que saber muy fácilmente en cada momento cual es el lado correcto del mercado. Deriva del Summation y el RASI pero lo que nos importa en realidad es qué nos quiere decir. En líneas generales, no intente ir contra la tendencia alcista si el indicador esta en color verde, ni contra la tendencia bajista si muestra naranja.
Seguiremos este consejo salvo que seamos un gran trader capaz de hacer cosas contra tendencia con éxito (son pocos los que lo logran) o un completo inconsciente que va a perder su dinero. Bueno, también puede haber profundizado en el Market Timing y la amplitud de mercado y saber que en determinadas circunstancias hay algunos indicadores capaces de señalarnos puntos de entrada corta contratendenciales.
Es cuestión de dedicarle un rato cada día, de seguimiento, de investigación, de lectura, de atreverte a probar cosas. El camino es apasionante porque el Market Timing no se acaba nunca. Siempre se pueden encontrar nuevos matices, nuevas aplicaciones de cosas que nos acoten más el riesgo y nos generen mayor consistencia en nuestro trading, que es de lo que se trata.
En estos años no he parado de aprender. Comencé probando cómo serían las cosas no despreciando al Nasdaq como hacen la mayoría de analistas. Seguí calculando nuevos niveles operativos para indicadores calculares en base a ratios que nos permitieran una comparación histórica razonable.
Todo eso está explicado en «Fundamentos de Market Timing para invertir en Bolsa» y, lo que es mejor, sigo aprendiendo. Con el libro ya terminado me acerqué de nuevo a la teoría de patrones de los McClellan. Les he dedicado varios artículos y me han servido mucho para mejorar el análisis cuando el mercado está en máximos…
Esta es mi idea del trading y el Market Timing es mi herramienta preferida. No hay Grial. El Grial es la consistencia en el trading. Hay otras maneras de lograr ser consistente y todas ellas pasan por el mismo proceso: aprendizaje, esfuerzo, dedicación, constancia…
Veo muchas similitudes entre tú y Blai5, en cuanto a curiosidad, empuje, ganas de desentrañar la realidad de los mercados y, porqué no decirlo, rebeldía ante el Status Quo. Tenemos suerte en España de teneros de una forma tan accesible. Gracias
Será por eso que somos amigos, jajajajaja. Durante mucho tiempo mi indicador Gatillo pudo descargarse en su web y así contribuí modestamente a su causa solidaria.
Buenas.
Lo leo y solo puedo añadir que así es… Hace tiempo alguien también me dijo que los inversores VALUE también tenían éxito gracias a eso a la constancia y consistencia de su método. Vayas por el camino que vayas persevera.
Y solo comentar que Grifols tiene una pinta estupenda, por máximos históricos y si uno ve a sus competidores podría pensar que hasta va retrasada con respecto a ellos…
En todo en esta vida hay que perseverar. Es una de las grandes enseñanzas que mi hija Mar me ha aportado en esta vida.
Espléndido artículo. Enhorabuena. Gracias.
Gracias a tí por leerlo y comentarlo
Nadie dijo que esto fuera fácil, pero tampoco es tan complicado. Cualquiera con dos dedos de frente y determinación puede convertirse en un buen trader.