Cuenta el saber popular el que sentido común es el menos común de los sentidos, así que los tenemos complicado. ¿Es posible aunar Bolsa y sentido común?
Partimos de la base de que pisamos terrenos muy complicados. Bolsa y sentido común se antoja el binomio ideal para invertir. Pero hay poderosos intereses en disociar ambos conceptos.
Sólo desde este punto de vista puede entenderse que los seguidores de los distintos tipos de análisis solo crean en «su verdad». El análisis técnico desprecia al fundamental, y viceversa.
Y ambos desprecian la macroeconomía. Aseguran que todo está descontado en los precios, que el mercado anticipa tal o cual cosa. Vamos, que Bolsa y sentido común son en apariencia conceptos reñidos.
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Perfil del buen inversor en Bolsa
Sin embargo, mi punto de vista es disonante en este punto. Un buen inversor en Bolsa es aquél que sabe apreciar en fases tempranas determinados indicios del mercado, de un activo concreto, de un sector, de una materia prima…
Por eso me parece increíble que Bolsa y sentido común no vayan de la mano. Es más, estoy íntimamente convencido de que es así porque les interesa a los de siempre.
Recordaré que procedo del periodismo y que en la Bolsa no hay nada más despreciado que las noticias. No pretendo cambiar este axioma, pero tomar con carácter general esta idea como absoluta tampoco me parece correcto.
Un caso concreto de Bolsa y sentido común: ahora mismo
Vayamos con un caso concreto de aplicación de Bolsa y sentido común. No hace falta remontarse mucho. Es ahora mismo. Está sucediendo ahora mismo y aunque sí se ha hablado de ello, no veo que el asunto ocupe portadas.
El sentido común nos dice ahora mismo que la prudencia es la madre de la ciencia. En lenguaje más bursátil podría ser algo así como «moderando la alegría se consolida la plusvalía».
Pues eso, que el binomio Bolsa y sentido común aconseja ahora mismo moderar las alegrías, pasarlas por el tamiz más severo que encontremos. ¿Por qué? Por esto que ven en el gráfico:
Este gráfico refleja los tipos de interés al que se prestan el dinero los bancos americanos en el mercado interbancario nocturno. Es el mercado de los «Repos» y en él los bancos prestan y piden dinero en función de sus necesidades de liquidez diaria.
¿Que refleja el gráfico? Que ha habido al menos dos días en el que el mercado ha estado seco y que nadie prestaba dinero. ¿No les suena? Fue justo lo que ocurrió en 2008 justo antes del estallido de la crisis subprime.
La Fed ha tomado cartas en el asunto, ha inyectado liquidez de forma extraordinaria y se plantea volver a algún tipo de QE. Los analistas atribuyen las tensiones de liquidez en el mercado americano a causas muy coyunturales y específicas de Estados Unidos. De hecho, parece que el mercado europeo no ha registrado el mismo fenómeno.
Sentido común y Bolsa: ¿y si extremamos la precaución?
Y aquí es donde llego yo con mi binomio de Bolsa y sentido común. Si llevo un buen año, que lo llevo, ¿no será mejor extremar las precauciones y ver cómo evoluciona este asunto?
Fundamentalmente, hay dos alternativas.
- La primera, que efectivamente todo obedezca a causas coyunturales y la cosa no pase de una anécdota.
- La segunda me preocupa más y no es descartable todavía. Consiste en que el episodio no sea zanjado por la Fed, que se contagie a Europa y que lleve a otra crisis de origen financiero.
Vaya hombre. Se añadiría a la crisis causada por la guerra comercial y arancelaria. Hay síntomas evidentes de ella con la ralentización del crecimiento económico. Y tenemos en el horizonte la posibilidad de un Brexit por las bravas…
En fin, el calendario tiene demasiados días marcados en rojo como para andarse con idioteces y en momentos como este Bolsa y sentido común deben ir de la mano.
Hay un peligro sordo ahí fuera y podemos seguir su evolución razonablemente. ¿De verdad hay de obviarlo y mirar sólo los gráficos? Muy bien, miremos gráficos y veamos qué puede hacerse.
La amplitud no es desesperada, ni mucho menos
El gráfico del S&P 500 aún no ha perdido esa forma de triángulo alcista, aunque la amenaza está ahí. De hecho, los seguidores de las ondas de Elliott auguran nuevos mínimos que destrozarían esa línea roja. Pero el presente es hoy y el S&P 500 ha reaccionado justo donde debe reaccionar.
Por su parte, la Línea AD muestra un canal ascendente muy claro. Por tanto, la situación de la amplitud está dentro de los cánones alcistas de libro. La línea acumulada de avance y descenso es, para mí, el auténtico índice de un mercado. Expliqué mis razones en «Fundamentos de Market Timing para invertir en Bolsa».
El segundo indicador, la Línea ADn, también mantiene esa connotación alcista. Hago aquí la observación de que si este indicador rompiera a la baja la linea roja tampoco sería un desastre. Es un estocástico y no haría más que lo que debe: reflejar que hay sobreventa. Pero de momento no hay ni sobreventa.
La mano fuerte no ha claudicado
No parece que el saldo de la mano fuerte se haya ido a terrenos muy negativos. Es algo peor si lo medimos desde la Línea AD que desde el precio del S&P 500 pero no parece que el dinero inteligente hayan abandonado al mercado a su suerte.
Es más, si nos vamos al ultra corto plazo, vemos que las posiciones del dinero inteligente en Utilities se moderan, y pasan a ser abiertamente vendedores en otros sectores defensivos, como Seguros o Servicios Financieros. Al tiempo, Tecnología, un sector siempre decisivo para consolidar las alzas, toma el mando de las operaciones.
Seguramente seguir el comportamiento de los que mandan en el mercado con respecto a los bancos americanos puede ser una de las claves del inmediato futuro, siempre que queramos aplicar el binomio Bolsa y sentido común, claro.
¿Alguna conclusión?
Una y muy clara, al menos por mi parte. Estoy en liquidez porque mis sistemas así lo decidieron hace ya bastantes días. Uno de ellos ha tratado de volver a entrar, pero el precio del S&P 500 no ha llegado a donde tenía que llegar.
¿Paro los sistemas hasta que se aclare el asunto? Pues puede que sí o puede que no. Nada se puede adelantar con carácter general pero hay algo que sí tengo muy claro. Mientras no considere que ha pasado el peligro, si hago una entrada no será con la posición habitual.
Con toda seguridad haré media posición o incluso menos si las cosas no están claras. Que cuesta un riñón arañarle unos euros al mercado y no es cuestión de dejárselos arrebatar por no estar atento a cosas que son muy básicas.
Y, para mí, es muy básico que Bolsa y sentido común deben ir de la mano. Soy un convencido de que, hasta este momento, no hay nada que indique que el mercado no va a hacer nuevos máximos. Es más, el Oscilador McClellan de Volumen ha dado su primera pista de que quiere volver a las subidas.
Pero hay una posibilidad de que cuestiones no reflejadas en los gráficos puedan tener su influencia. ¿O el gráfico de Lehman Brothers anticipó algo en su momento? Pues eso. Bolsa y sentido común.
Si las cosas no están claras, no eres un kamikaze y no tienes ese impulso tan habitual de decirle tú al mercado lo que tiene que hacer, lo mejor es extremar la precaución, no vaya a ser que…